Tijuana, B.C.- Armonía y sonoridad, innovación musical y propuestas de vanguardia fueron elementos fundamentales con que la agrupación tijuanense La Ballena de Jonás conformó en el concierto de presentación de su disco homónimo ofrecido en la Sala de Usos Múltiples del Centro Cultural Tijuana.
Los primeros en el escenario fueron los músicos del grupo Perihelios, quienes calentaron el ánimo previamente a la aparición de la ya reconocida Ballena de Jonás, sus integrantes se volcaron hacia el público quien celebró con nutridos aplausos cada uno de los temas interpretados de este su primer álbum.
Los acordes de Cantina Calavera fueron reconocidos por los asistentes, un vínculo especial es el que establece con su público La Ballena de Jonás, “este concierto es para ustedes que lo disfruten”, expresaba el acordeonista Saúl Huerta, “agradecemos a todas las personas del CECUT que nos han hechos sentir como en casa”.
“La Ballena de Jonás es una muestra de todo el latir de Tijuana, una muestra de cómo se pueden hermanar sonidos, tierras y sabores distintos, fusiona ritmos que se convierten en amigables como todo lo que lo que se hace aquí”, reveló en entrevista previa Huerta quien ha participado en la agrupación desde su formación en 2005.
Las polkas y los sonidos gipsy que con gran maestría recrea de menara innovadora La Ballena, materializaron el sentir de una ciudad que inspira a estos músicos, Periscopio, Piruetas, Devorator, y El Torero, hicieron que la noche del pasado sábado se cubriera de armoniosas piezas de excelente manufactura.
“Es un gusto presentarnos con esta primera producción, es una mezcla de distintos géneros, que son fiel reflejo de nuestra ciudad se combinan colores sabores y sonidos es una fusión muy interesante de tango, polkas, música gitana, jazz”, dijo en entrevista Jorge Alberto Reyna guitarrista y bajista del grupo, que estudió con la Orquesta de Baja California
A lo largo de sus cinco años de existencia ha sido notable la evolución de su concepto musical que les ha retribuido con una audiencia ya numerosa, las fusiones propuestas por en este primer CD al que se integran La noche del Dandi, Picaresca, Reminiscencias al Medievo y Espíritu a las 15 letras de Praga que se oyeron esa noche.
A la música original de Mario de Alvarado al piano, Óscar R. Barreda también en guitarra y bajo, el violinista Ulises Armenta se sumaron en este primer álbum y concierto los talentos de Carlos María en la batería, Emiliano Guadarrama en el clarinete, Leopoldo González en la flauta transversal y Omar Firestone en el cello.
Estuvieron también Pablo López y Andrés Martín quienes aportaron sus talentos al lado de sus compañeros, sonaron así las últimas piezas como Cantos Perdidos, Trecho de Parca, El burdel, Amukutari, Vaquero y 066.
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